Frases de Chapo Guzmán

Fuera de la sociedad, el hombre es una bestia o un dios.

Casi todos los hombres ganan al ser conocidos.

Las leyes se han hecho para el bien de los ciudadanos.

Entiendo por religión, no ya un conjunto de ritos y costumbres, sino lo que está en el origen de todas las religiones, poniéndonos cara a cara con el Creador.

En materia de gobierno todo cambio es sospechoso, aunque sea para mejorar.

Un síntoma de que te acercas a una crisis nerviosa es creer que tu trabajo es tremendamente importante.

En las religiones es preciso ser sinceros; verdaderos paganos, verdaderos judíos, verdaderos cristianos.

Las mujeres juegan con su belleza como los niños con un cuchillo, y se lastiman.

La ley debe ser como la muerte, que no exceptúa a nadie.

La base de todas las sociedades grandes y duraderas ha consistido, no en la mutua voluntad que los hombres se tenían, sino en el recíproco temor.

Nuestra sociedad es masculina, y hasta que no entre en ella la mujer no será humana.

Yo siempre seré el futuro Nóbel. Debe ser una tradición escandinava.

Mediante el trabajo ha sido como la mujer ha podido franquear la distancia que la separa del hombre. El trabajo es lo único que puede garantizarle una libertad completa.

Estar preparados para la guerra es uno de los medios más eficaces para conservar la paz.

La letra con sangre entra.

Algunos políticos sostienen que la única manera de hacer seguro a un revolucionario es darle un escaño en el parlamento.

Más Estados han perecido por la depravación de las costumbres que por la violación de las leyes.

El que un perro haya mordido a un hombre no es ninguna noticia; una noticia es el que un hombre haya mordido a un perro.

A las mujeres les gusta la moda porque toda novedad es siempre un reflejo de la juventud.

Hay que evitar el combate en lugar de vencer en él. Hay triunfos que empobrecen al vencido, pero no enriquecen al vencedor.

Las mujeres no conceden a la amistad más que lo que sisan al amor.