frases de palabra

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  Las palabras ásperas hieren más de una flecha envenenada.

  
  

• Decir lo que sentimos. Sentir lo que decimos. Concordar las palabras con la vida.

• Las palabras son las hojas, los actos son los frutos.

• La ciencia moderna aún no ha producido un medicamento tranquilizador tan eficaz como lo son unas pocas palabras bondadosas.

• Muchas veces las palabras que teníamos que haber dicho no se presentan ante nuestro espíritu hasta que ya es demasiado tarde.

• Hay que masticar las palabras más que un pedazo de pan.

• Las mejores palabras son aquellas que encierran un profundo significado y, al mismo tiempo, resultan comprensibles para todo el mundo.

• Las palabras son como las abejas, tienen miel y aguijón.

• Como los budistas, sé que la palabra no es el hecho. Si digo manzana no es la maravilla innombrable que enamora el verano, si digo árbol apenas me acerco a lo que saben las aves, el caballo siempre fue y será lo que es sin saber que así lo nombro.

• Una palabra mal colocada estropea el más bello pensamiento.

• Todo lo que ha ocurrido teme a su palabra.

• Escribir es perdurar en la palabra, creo que sólo la ausencia puede nombrar a la ausencia. Pronunciar una palabra es fundar ya el olvido.

• Las palabras deshonran cuando no llevan detrás un corazón limpio y entero.

• Palabra que retienes dentro de tí, es tu esclava; la que se te escapa, es tu señora.

• Las palabras que no satisfagan al oyente, le causan fastidio y disgusto; ello se manifiesta generalmente por copiosos bostezos. Cuando hables, pues, a hombres cuya benevolencia quieres captarte, si observas en ella tales muestras de aburrimiento, abrevia tu discurso o cambia de terna; si no lo haces, recogerás en vez de la benevolencia que deseas, odio y enemistad.

• La palabra sincera huye, como niña decorosa, de los comedores renales.

• Uno siente que ciertas palabras son terribles para todos los demás, salvo para nosotros mismos.

• Actividad artística impulsada por la potencia del creador capaz de despertar emociones.

• Las palabras son una medicina para el alma que sufre.

• Más apaga buena palabra que caldera de agua.

• Las palabras deshonran cuando no llevan detrás un corazón limpio y entero. Las palabras están de más, cuando no fundan, cuando no esclarecen, cuando no atraen, cuando no añaden.

• Cada palabra es como una innecesaria mancha en el silencio y en la nada.

• A buen entendedor, pocas palabras bastan.

• Con buenas palabras y mejores hechos, conquistaras el mundo entero.

• Las palabras han de expresar con fidelidad nuestro pensamiento.

• Quien tiene la íntima substancia, también tiene las palabras; quien tiene palabras, no siempre tiene también la íntima substancia.

• Las palabras es todo lo que tenemos.

• Necesitamos pocas palabras para expresar lo esencial; necesitamos todas las palabras para hacerlo real.

• El que habla en exceso y sin cordura raras veces pone en práctica lo que dice. El hombre noble nunca teme que sus palabras superen a sus obras.

• Luego que has soltado una palabra, ésta te domina; pero mientras no la has soltado eres un domador.

• Una palabra rara es en una página como un adoquín levantado en una calle.

• La palabra es la alarma de los humanos para aproximarse unos a otros.

• Los conceptos están incluidos en las palabras.

• La palabra impresa embalsama la verdad para la posteridad.

• Las palabras antiguas son las mejores, y las breves las mejores de todas.

• Hay palabras que por las ideas que revelan llaman nuestra atención y atraen nuestras simpatías hacia los seres que las pronuncian.

• Mi deseo es morir cerca de tu palabra.

• El instrumento básico para la manipulación de la realidad es la manipulación de las palabras. Si tu puedes controlar el significado de las palabras puedes controlar a la gente que utiliza esas palabras.

• Una imprudente palabra, nuestra ruina a veces labra.

• Nuestras palabras no son más que migas que caen del banquete de la mente.

• El noble no da crédito a las palabras por la sola autoridad de quien las pronuncia; tampoco rechaza la verdad aunque provenga de una persona ignorante.

• A cartas, cartas, y a palabras, palabras.

• Las palabras se las lleva el viento.

• La mejor forma de cumplir con la palabra empeñada es no darla jamás.

• A palabras de borrachos oídos de cantinero.

• A palabras necias, oídos sordos.

• El noble no expresa nunca su parecer sobre las cosas que no comprende. Busca la máxima precisión en sus palabras; esto es lo más importante.

• Más vale una palabra a tiempo que cien a destiempo.

• Las citas son una manera de repetir erróneamente las palabras de otro.

• Feas palabras, aun livianamente dichas ofenden.

• La esperanza no es ni realidad ni quimera. Es como los caminos de la Tierra: sobre la Tierra no había caminos; han sido hechos por el gran número de transeúntes.

• Lo que dicen las palabras no dura. Duran las palabras. Porque las palabras son siempre las mismas y lo que dicen no es nunca lo mismo.

• Pesada y molesta palabra es ruego.

• Has venido a este mundo que no entiende nada sin palabras, casi sin palabras.

• Si un hombre cualquiera, incluso vulgar, supiera narrar su propia vida, escribiría una de las más grandes novelas que jamás se haya escrito.

• Una palabra puede herir. Pero un martillazo es feroz.

• Con las palabras que no he dicho he desarmado mis armas.

• Mientras nos mudamos de una cuna a un ataúd...¡Cuánta palabrería inútil!.

• Qué palabra es verdad. Resbaladiza, tramposa, poco confiable. Traté en estos libros de decir la verdad.

• El loro plagia la palabra, pero quien está preso es el canario.

• Hemos olvidado que de todas las zozobras humanas sólo la palabra se encuentra iluminada.

• Si he sufrido la sed, el hambre, todo lo que era mío y resultó ser nada, si he segado las sombras en silencio, me queda la palabra.

• Las palabras son inútiles, tercas, retorcidas como tornillos que no entran rectos. Y me cansan. Pero son lo único que tengo.

• Si lo pensamos, veremos que muchos de los disgustos que nos sobrevienen lo son por palabras innecesarias.

• ¡Tú más aún: tú como tú, sin palabras toda singular, desnudez única, tú, sola!.

• A menudo, igual que los pequeños ante una tienda de juguetería, pego la cara a las brillantes lunas donde se venden las palabras bellas.

• Algunas palabras abren heridas. Otras abren caminos.

• Palabra, vuelo de piedra, puño y flor; de vastedad, de pequeñez, de todo lo humanamente humano; de todo lo divino que no alcanza a llenar su dimensión en nuestros labios sedientos de palabras.

• Sin palabras, vengadores, negamos solitarios la facultad de despertarnos mutuamente voluptuosidad.

• No se nace mujer: llega una a serlo. Ningún destino biológico, físico o económico define la figura que reviste en el seno de la sociedad la hembra humana; la civilización es quien elabora ese producto intermedio entre el macho y el castrado al que se califica como femenino.

• Inventa mundos nuevos y cuida tu palabra; el adjetivo, cuando no da vida, mata.

• Más hermosa que todas las mujeres posibles (y esto basta para definirla).

• Palabras impregnadas con fuego celestial.