Frases de William Feather
Tengo 10 mandamientos. Los nueve primeros dicen: ¡no debes aburrir!. El décimo dice: tienes que tener derecho al montaje final de la pelÃcula.
Los siervos fieles nunca se jubilan. Usted puede retirarse de su carrera, pero nunca se podrá retirarse del servicio a Dios.
Recientemente leà las historias que escribà en mis 20 años, para poner en un volumen. Y aquà está esta mujer joven frágil, al escribir sobre el matrimonio como, no es lo peor, pero lo más aburrido que le puede pasar a una persona. Ahora creo que me equivoqué. Me gusta estar equivocado.
La gente está triste. La gente se rompió. La gente está preocupada por el dinero, la gente está preocupada de que no son suficientes y que no lleguen a nada y no se sienten bien consigo mismos. La gente tiene momentos difÃciles, y todo el mundo está fingiendo que no es verdad, y hay que romper esa chapa.
Fui a la escuela de educación especial. Siempre asumà cuando tuve la oportunidad me gustarÃa tratar de ayudar a los niños con discapacidades.
Una de las muchas cosas que nadie te cuenta sobre la mediana edad es que es un cambio agradable de ser joven.
Éxito temporal se puede lograr a pesar de la falta de otras cualidades fundamentales, pero no hay avances se puede mantener sin trabajo duro.
Aquà está el secreto de la inspiración: DÃgase a sà mismo que miles y decenas de miles de personas, no es muy inteligente y ciertamente no más inteligente que el resto de nosotros, han llegado a dominar los problemas tan difÃciles como las que hoy desconciertan a usted.
Un montón de gente se pierda su parte de felicidad, no porque nunca se encontraron, pero debido a que no se detuvo a disfrutar de ella.
Una de las acusaciones de civilizaciones es que la felicidad y la inteligencia están tan rara vez se encuentran en la misma persona.
No es una décima parte de los que están en el negocio están haciendo lo mejor que pudimos, si simplemente seguimos los principios que se sabe que nuestros abuelos.
La mayorÃa de nosotros consideramos la buena suerte como nuestro derecho, y la mala suerte como una traición de ese derecho.
Una idea no vale mucho hasta que un hombre se encontró que tiene la energÃa y la capacidad de hacer que funcione.
Si la gente realmente le gusta trabajar, todavÃa estarÃamos arando la tierra con palos y el transporte de mercancÃas en la espalda.
La filosofÃa detrás de gran parte de publicidad se basa en la vieja observación de que cada hombre es en realidad dos hombres - el hombre es él y el hombre que quiere ser.