Caen en la trampa de creer que el estado
Caen en la trampa de creer que el estado es también necesario para proteger a los indefensos, pobres y desvalidos (sean ?pequeños? accionistas, consumidores de a pie, trabajadores, etc.) sin entender que las supuestas medidas de protección sistemáticamente tienen el efecto, como demuestra la teorÃa económica, de perjudicar en cada caso precisamente a aquellos a los que se dice proteger, por lo que desaparece también una de las más burdas y manidas justificaciones de la existencia del estado.