La culpa es una ilusión venenoso. Mucha
La culpa es una ilusión venenoso. Muchas lenguas no tienen ni siquiera una palabra de culpabilidad. Claro, todos lo sentimos. Pero tenemos también que decidir si vamos a dejar que la culpa nos llevan hacia abajo o no. Reconocer los sentimientos y, a continuación, darse permiso para dejarlos ir.