No conozco nada más despreciable y patÃ
No conozco nada más despreciable y patético que un hombre que dedica todas las horas del dÃa de vigilia a la toma de dinero por el bien de dinero.
No conozco nada más despreciable y patético que un hombre que dedica todas las horas del dÃa de vigilia a la toma de dinero por el bien de dinero.