× Amor Amistad Frases Interesantes Democracia Libertad Conocimiento Dolor Guerra

Frases Filosóficas

0
  • La espiral de la violencia sólo la frena el milagro del perdón.

  • El cinismo consiste en ver las cosas como realmente son, y no como se quiere que sean.

  • ¿Qué locura o qué desatino me lleva a contar las ajenas faltas, teniendo tanto que decir de las mías?

  • Hay que dejar la vanidad a los que no tienen otra cosa que exhibir.

  • Cuando el hombre se mira mucho a sí mismo, llega a no saber cuál es su cara y cuál es su careta.

  • Nada más hipócrita que la eliminación de la hipocresía.

  • La ignorancia es la madre de todos los crímenes.

  • Nada se puede aceptar de un malvado, so pena de envilecerse.

  • Más vale un minuto de vida franca y sincera que cien años de hipocresía.

  • Por la calle del después se llega a la plaza de nunca.

  • Sobre el cimiento de la necedad, no asienta ningún discreto oficio.

  • La violencia crea más problemas sociales que los que resuelve.

  • También a un gran hombre lo puede exasperar una miserable mosca.

  • Un monstruo hay en el mundo: el ocioso.

  • Un egoísta es aquel que se empeña en hablarte de sí mismo cuando tú te estas muriendo de ganas de hablarle de ti.

  • Prefiero un vicio tolerante a una virtud obstinada.

  • Los cobardes mueren muchas veces antes de su verdadera muerte; los valientes prueban la muerte sólo una vez.

  • En la mayoría de los casos la ignorancia es algo superable. No sabemos porque no queremos saber.

  • El mal está sólo en tu mente y no en lo externo. La mente pura siempre ve solamente lo bueno en cada cosa, pero la mala se encarga de inventar el mal.

  • El sabio uso del ocio es un producto de la civilización y de la educación.

  • Muchos que quisieron traer luz, fueron colgados de un farol.

  • Por nuestra ignorancia no sabemos las cosas necesarias; por el error las sabemos mal.

  • Una necedad, aunque la repitan millones de bocas, no dejan de ser una necedad.

  • La violencia es el miedo a los ideales de los demás.

  • Ciertos libros parecen haber sido escritos no para aprender de ellos sino para que se reconozca lo que sabía su autor.

  • Se conocen infinitas clases de necios; la más deplorable es la de los parlanchines empeñados en demostrar que tienen talento.

  • Ser consciente de la propia ignorancia es un gran paso hacia el saber.

  • Desdichado el que duerme en el mañana.

  • La violencia es el último recurso del incompetente.

  • Los cobardes son los que se cobijan bajo las normas.

  • Los perezosos siempre hablan de lo que piensan hacer, de lo que harán; los que de veras hacen algo no tienen tiempo de hablar ni de lo que hacen.

  • La avaricia lo pierde todo por quererlo todo.

  • La violencia no es sino una expresión del miedo.

  • ¿Qué ve el ciego, aunque se le ponga una lámpara en la mano?

  • El hombre emplea la hipocresía para engañarse a sí mismo, acaso más que para engañar a otros.

  • Los defectos, como las pajas, sobrenadan en la superficie; el que quiere encontrar perlas, debe sumergirse.

  • El malvado descansa algunas veces; el necio jamás.

  • No se puede ser y no ser algo al mismo tiempo y bajo el mismo aspecto.

  • La ignorancia humana no permanece detrás de la ciencia, crece tan rápidamente como ésta.

  • Es mejor ser examinado que ignorado.

  • Cuando mejor es uno, tanto más difícilmente llega a sospechar de la maldad de los otros.

  • ¿Es usted un demonio? Soy un hombre. Y por lo tanto tengo dentro de mí todos los demonios.

  • Si nos cruzamos de brazos seremos cómplices de un sistema que ha legitimado la muerte silenciosa.

  • Nadie está libre de decir estupideces, lo malo es decirlas con énfasis.

  • Al hombre perverso se le conoce en un sólo día; para conocer al hombre justo hace falta más tiempo.

  • El hombre nació en la barbarie, cuando matar a su semejante era una condición normal de la existencia. Se le otorgo una conciencia. Y ahora ha llegado el día en que la violencia hacia otro ser humano debe volverse tan aborrecible como comer la carne de otro.

  • Todos los que parecen estúpidos, lo son y, además también lo son la mitad de los que no lo parecen.

  • El recuerdo del mal pasado es alegre.

  • El egoísta sería capaz de pegar fuego a la casa del vecino para hacer freir un huevo.

  • Es extraña la ligereza con que los malvados creen que todo les saldrá bien.

  • ¿Quién puede vanagloriarse de no tener defectos? Examinando los suyos, aprenda cada uno a perdonar los de los demás.

  • En una mano lleva la piedra, y con la otra muestra el pan.

  • Los necios admiran, los sensatos aprueban.

  • Desconfío de la incomunicabilidad; es la fuente de toda la violencia.

  • La más segura cura para la vanidad es la soledad.

  • Una de las ventajas de ser desordenado es que uno está continuamente haciendo nuevos y excitantes descubrimientos.

  • La tarea que enfrentan los devotos de la no violencia es muy difícil, pero ninguna dificultad puede abatir a los hombres que tienen fe en su misión.

  • La violencia, sea cual sea la forma en que se manifieste, es un fracaso.

  • Nada torna a la gente más desnaturalizada e insubordinada que una larga y constante ociosidad.

  • A veces cuesta mucho más eliminar un sólo defecto que adquirir cien virtudes.

  • Todos los cerebros del mundo son impotentes contra cualquier estupidez que esté de moda.

  • Sólo los cobardes son valientes con sus mujeres.

  • Así corrompe el ocio al cuerpo humano, como se corrompen las aguas si están quedas.

  • La sola idea de que una cosa cruel pueda ser útil es ya de por sí inmoral.

  • Para mí la vanidad es una dolencia tan superficial, que basta con rascarme un rato para que se me quite.

  • En la amistad y en el amor se es más feliz con la ignorancia que con el saber.

  • El mal es árbol que crece y que cortado retoña.

  • Las razas laboriosas encuentran una gran molestia en soportar la ociosidad.

  • La vanidad es tan fantástica, que hasta nos induce a preocuparnos de lo que pensarán de nosotros una vez muertos y enterrados.

  • Una persona ociosa tienta al diablo para que la tiente.

  • Como mala persona soy un completo desastre. Hay montones de gente que afirman que no he hecho nada malo en toda mi vida. Por supuesto sólo se atreven a decirlo a mis espaldas.

  • El cansancio ronca sobre los guijarros; en tanto que la pereza halla dura la almohada de pluma.

  • Aconseja al ignorante, te tomará por su enemigo.

  • El que todo lo aplaza no dejará nada concluido ni perfecto.

  • Para una persona no violenta, todo el mundo es su familia.

  • El hombre es un lobo para el hombre.

  • Ha sido mi experiencia que gente que no tiene vicios tiene muy pocas virtudes.

  • No existe ningún hombre que si puede ganar el máximo se conforme con el mínimo.

  • La ociosidad, como el moho, desgasta mucho más rápidamente que el trabajo.

  • Es propio de los necios ver los vicios ajenos y olvidar los propios.